La canción "Drunk in the Bathtub" de Jessie Murph describe la sensación de estar perdido en un ambiente de fiesta, superado por los efectos del consumo excesivo de alcohol. El narrador describe sentirse débil, incapaz de hablar con claridad y haciendo un desastre de sí mismo. Expresa su deseo de que le dejen en paz, buscando refugio en el cuarto de baño, donde puede estar borracho y solo. El uso de imágenes, como la presencia de cocaína y strippers, subraya la naturaleza salvaje y descontrolada de la fiesta. Además, el compositor hace referencia a la sensación de estar atrapado, incapaz de escapar de las emociones negativas que acompañan al consumo excesivo de alcohol. En general, la canción retrata los peligros del consumo excesivo de alcohol y la importancia del autocuidado y la autosuficiencia en situaciones difíciles.